Beatriz Grecco, escritora de la simplicidad

Amo tu locura

de Beatriz Grecco (octubre 2018)

SÍ… te amo ¡Amo tu locura!

Me dijiste en el mismo tono burlón de siempre.

Pero… escúchame bien… yo no estoy loca. Decime: ¿Quién no guarda un haz de luz en un frasquito? ¿Quién no quiere renacer en mil colores? No me diga que nunca escribiste en tu mente con tinta invisible. ¿Acaso no te inundaste de angustia, y tus ojos fueron diques?

Ayer, mientras me peinaba frente al espejo y te pedí si me ayudabas a buscar en los rincones esos sueños perdidos hace tiempo, me dijiste:

—Vos estas perdida. Ya basta. Ya no puedo respirar en tu presencia, decime qué busco en esta casa, ¿qué hago aquí?

Mientras mi mano seguía por su propia iniciativa peinándome y mi vista estaba fija en la imagen de tu cara que me devolvía el espejo, ya casi ni te escuchaba. Creía entender algo así como: “vidas separadas”, después unos murmullos, más frases sin sentido: “mi partida era inevitable, no me corresponde cuidarte…”  otra vez susurros confusos, y el peine que insistía en hacer subir y bajar mi mano.

Y seguiste moviendo tu boca… pero decidí no oírte, ignorar tus quejas y entonces en tu boca sonaban canciones.

De pronto el reloj se paró, hice silencio. No más quejas, no más música, no más VOS. Te habías ido.

Y hoy sigo peinándome frente al espejo y soy la misma, pero vos no estás. Igual te sigo escuchando y quizás tenías razón cuando me decías a cada rato:

—¿Qué hacés en esta casa, sin sobresalir en nada? Parece que ni estás en esta vida. ¡No existís!

O tal vez estás equivocado. ¡Sí es eso! Yo me veo reflejada. ¡Yo estoy!

Y es entonces cuando descubro que el espejo me sonríe, que un brillo me ilumina y enceguece por un instante, mientras siento renacer la ilusión, la claridad de ser yo misma otra vez. Deseo que esta paz me siga acompañando y comprendo al fin, en carne propia, lo que es el maltrato psicológico.

Con una alegría que me desborda, agarro las llaves del auto, corro, no sin dificultad, el cuerpo rígido que me impide abrir la puerta, y salgo a vivir mi libertad.

Te pinto

de Beatriz Grecco (octubre 2018)

Te beso, te abrazo. Te peino y despeino.

Mis ojos se astillan de tanto mirar.

Tu boca está llena de risas ahogadas.

Te callas. Te hablo. Te vuelvo a abrazar.

 

Mi nariz se embriaga del pino en tus manos.

Abanico estrellas de tanto buscar.

Toco tierra fría. Destellan mis ojos.

Te pinto y re-pinto y… te vuelvo a pintar.

 

Beatriz Grecco (20/12-1955- 6/1/2019). Presidente de S.A.D.E.CH. Amiga, Escritora, Profesora, Artista.