Lectura de Una familia bajo la nieve Monica Zwaig

Lectura de Una familia bajo la nieve Monica Zwaig (Blatt & Ríos, 2021)

Una familia bajo la nieve es la primera novela de Monica (así sin tilde) Zwaig – escritora nacida en Francia y radicada en Argentina desde el 2007-. El libro está narrado desde la voz de Harmonica, hija de exiliados de la dictadura argentina, quien vive- junto a su familia- en los suburbios de una ciudad francesa.

«Yo empiezo con una hache, para que suene más francés porque en este país hay un montón de letras mudas y porque mis padres tenían la secreta esperanza de tener una hija más bien silenciosa, que no opine mucho sobre las cosas»

La protagonista va entrelazando las microhistorias familiares, reconstruyendo su árbol genealógico – desde los abuelos tanto maternos como paternos- con su historia adulta. Harmonica decide trabajar en Buenos Aires como abogada en causas de lesa humanidad, realizando así el regreso a Argentina que sus padres no han hecho.

“Mi abuela se crio con la dulzura a su alcance, pero no la podía probar. Esto es una gran semilla de la revolución. En su vida adulta se vengó y probó toda la dulzura junta”

Algunas lecturas sobre la novela

En primer lugar, la idea de traducción, teniendo como lengua madre el francés, Zwaig elige escribir el texto en español rioplatense “Ginkgo estaba para atrás”– esta idea me encantó. Ahora bien, si pensamos la idea de “lengua madre” en el español – ya que es la lengua de la familia- y el francés como la lengua del exilio, el proceso de desterritorialización y reterritorialización de la lengua – y desde la lengua- es hermoso. Esto se une al proceso de reconstrucción que lleva a cabo la protagonista: tanto del árbol familia- a modo simbólico lo encontramos en el Ginkgo Biloba “árbol que no tiene parientes vivos” que hace traer de Francia para plantar en Argentina “plantar memoria”- como así también de búsqueda de “recomposición” del vínculo materno-filial en el país de origen. Exilio- lengua- territorio- identidad- desarraigo.

Por otro lado, la relación escritura- vida, es muy interesante cómo a medida que avanza la vida del personaje la escritura va volviéndose más puntual: una narrativa un poco vertiginosa de la primera parte – degustando cada momento de la infancia, pero dando grandes saltos en el tiempo-; el diario íntimo de la segunda parte – Harmonica ya en Argentina- recuperando casi el día a día; hasta llegar al último apartado donde se “enlentence” el tiempo, la voz narradora se detiene hasta en los más mínimos detalles de esos momentos finales del vínculo madre-hija-árbol -que también podrían ser memoria-familia-Francia-.

“Tené cuidado, la memoria es un animal que no se puede domesticar”

Por último, el humor y la frescura conque narra su infancia, la separación de sus padres – el odio a Julio Iglesias que le recuerda a su madre-, la dictadura y la revolución “Papá nos dejaría morir de frío para enseñarnos la disciplina si le parecía necesario. No hay nada peor que un revolucionario con el corazón roto” y su situación presente: estudio, trabajo, relaciones sentimentales y relaciones familiares.

Monica Zwaig (1981) nació y se crio en Francia. A los 26 años viajó a Argentina, donde vive desde entonces. Además de abogada, es actriz, dramaturga y traductora- (Biografía de Blatt & Ríos)